Europa | Las vacaciones contemplativas del BCE

Resumen

En su conferencia de prensa del jueves tras la reunión del BCE se despidió la presidenta Lagarde de periodistas y oyentes deseando unas vacaciones de “esperar y ver”, expresión muy utilizada por banqueros centrales para dar a entender que los siguientes movimientos de política monetaria dependerán de los acontecimientos.

Puntos clave

• Puntos clave:
• Lagarde dio a entender que el BCE está relativamente cómodo con la situación actual de los tipos de interés (2% para el tipo de depósito) y que sólo harán alguna bajada más si lo requieren los datos o los acontecimientos.
• Antes de la reunión, los mercados descontaban una bajada de tipos adicional de 25 puntos para lo que queda del año, dados los riesgos pendientes ligados a la presión proteccionista estadounidense y -vinculado a ello- a la reciente apreciación del euro (y muchas otras monedas) respecto al dólar, que endurece las condiciones financieras europeas, contribuye a reducir las presiones inflacionistas y permite tipos más bajos.
• El principal motivo para el optimismo parece obvio: las buenas noticias de los últimos días sobre un potencial acuerdo de aranceles con Estados Unidos, tras las amenazas tácticas de Trump de subirlos al 30%.
• El otro factor que refleja ese optimismo es la positiva lectura de los datos de crecimiento del PIB (no tienen que ver “sólo” con el anticipo de exportaciones a Estados Unidos, según Lagarde), y la poca preocupación aparente porque la inflación se vaya muy por debajo del objetivo.
• Queda mucho por definir en la fase final del año, pese a que las buenas noticias recientes permitan al BCE irse relativamente tranquilo de vacaciones.

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